Jutta PetersenCon motivo del cierre de ciclo de la moradora ("Madre del Ashram"), Jutta Petersen, del Centro de Desarrollo Humano, Educación Ambiental y Trascendental  de Umécuaro, mismo que fue efectivo el 30 de Septiembre de 2013, recogimos algunas de sus experiencias para compartirlas con ustedes:
 
¿Cual sería su balance como Madre del Ashram de Umécuaro, con qué se queda, qué se lleva, qué nos deja, qué faltaría por hacer en este lugar?
 
Me llevo un cúmulo de experiencias increíbles, una esperanza de vida que me ha dado este lugar. 
 
Me llevo mucho cariño de la gente, muchos abrazos, muchas frases hermosas que me han dado, la experiencia increíble del día a día, todo lo que yo viví en el Ashram en todas las situaciones, tanto en el ambiental como en el humano, como en el personal, con la gente que estuve trabajando. Entonces es una experiencia impresionante, enorme, enorme; me voy muy contenta, muy satisfecha, y realmente entregué el 100% de mi parte.
También, en lo personal, un crecimiento, un darme cuenta de algunos detalles que yo tengo que trabajar en mí todavía, que la Hermandad me hizo ver algunas cosas, también me sirvieron para crecer y, bueno, entrego y dejo en este lugar todo mi corazón y todo mi amor, mi trabajo, mi dedicación, que fue maravilloso, todos los días fueron hermosos, en un sentido o en el otro, teniendo experiencias a veces fuertes, aveces de sorpresa, entonces eso es lo bello porque cuando yo pensaba que ya tenía controlada la situación...(risas), que ya más o menos había encontrado organización y todo bien, Raj, me llegaba por otro lado!, entonces eso es hermosísimo, porque está uno dia a día, el aquí y el ahora en el momento que importa, (como ahora) y no importa el espacio si no está uno abierto y presente. Muchas gracias a todos.
 
Gracias Jutta por todo lo compartido!